Continental: el libre comercio es necesario para lograr una movilidad asequible para todos

• Conducción automatizada, taxis-robots, inteligencia artificial, ciberseguridad: Continental señala el camino global de la movilidad del futuro
• Motor eléctrico o de combustión: en la asamblea general de la empresa incluida en el índice bursátil DAX, el CEO, el Dr. Elmar Degenhart, advierte a la clase política contra "forzar soluciones que no son rentables"
• Desde 1998: la cifra total de negocio se ha multiplicado por más de seis y el resultado operativo, por doce
• Previsión de cifra de negocio para 2025: claramente superior a los 65.000 millones de euros

Hanóver, 27 de abril de 2018. Libre comercio en lugar de guerra comercial. Hoy, en el marco de la asamblea general de la empresa tecnológica Continental, el presidente de la Junta Directiva, el Dr. Elmar Degenhart, hizo este llamamiento a la clase política: "El proteccionismo y las guerras comerciales encarecen nuestros productos. La desigualdad de aranceles, por ejemplo, es una carga para el libre comercio de automóviles entre EE. UU. y Europa. La mejor solución es eliminarlos o equipararlos en el nivel mínimo. Reclamamos que los responsables políticos negocien en este sentido. Esperamos que se comprometan con un libre comercio justo. Porque quien encarece las mercancías de forma artificial, reduce la renta nacional. ¡Y pone en riesgo los puestos de trabajo y la prosperidad! Los aranceles no generan ganadores, sino solo perdedores", advirtió Degenhart en Hanóver frente a los más de 1.000 participantes en la asamblea general.

Degenhart subrayó la importancia del libre flujo de mercancías para la propia empresa. Así, por ejemplo, las divisiones Automotive de la empresa tecnológica colaboran con más de 17.000 proveedores y asociados en todo el mundo. "Trabajan con más de 140.000 millones de componentes al año, que cruzan cuatro fronteras nacionales, en promedio, antes de llegar a nuestros clientes como productos terminados. El proteccionismo y las guerras comerciales encarecen nuestros productos".

Continental debe transformarse y adaptarse constantemente a la rápida evolución de los mercados, es decir: anticiparse haciendo del cambio la normalidad cotidiana. "Por eso, somos cada vez más flexibles y ágiles. Así nos mantenemos permanentemente capaces de competir y de adaptarnos al futuro. Esto se logra mediante una cultura de trabajo en red, jerarquías planas, pequeñas unidades que reaccionen con mayor rapidez a los deseos de nuestros clientes, y más responsabilidad y libertad para nuestro personal, por ejemplo, a través de una mayor cantidad de horarios de trabajo basados en la confianza, en todo el mundo", enfatizó Degenhart.

Por este motivo, en este momento se está revisando la estructura organizativa de Continental: "Actualmente, estamos analizando los escenarios adecuados. De esta forma, sabremos cuál es la estructura organizativa que nos permitirá cambiar con mayor rapidez. La presentación de una recomendación al Consejo de Vigilancia está prevista para mitad de año. Seguimos ampliando los valores y la red de valores de Continental. En este sentido, la Junta Directiva y los empleados hemos cerrado recientemente un nuevo acuerdo de futuro. Así garantizamos juntos el mayor éxito", explicó Degenhart.

El presidente de la Junta Directiva de Continental señaló que la cifra de negocio de la empresa se multiplicó por más de seis en los últimos 20 años y que el resultado operativo se multiplicó por doce. "Nuestra marcha exitosa no se detiene. Para el año 2020, nos proponemos alcanzar una cifra de negocio superior a los 50.000 millones de euros. Nuestra cifra de negocio prevista para el año 2025 supera ampliamente el umbral de los 65.000 millones de euros. Esto lo lograremos por nuestros propios medios", destacó Degenhart.

Según Degenhart, la tecnología de propulsión sigue siendo un gran desafío, la cual debe ser cada vez más eficiente y limpia: "El futuro de la propulsión automotriz es eléctrico. Estamos convencidos de ello. Sin embargo, eléctrico no es automáticamente sinónimo de limpio. El balance medioambiental de la movilidad eléctrica no es favorable en la actualidad. En este sentido, hemos calculado un modelo de crecimiento extremamente agresivo y teóricamente posible a partir del 2020. Conforme a este modelo, recién en el año 2050, nueve de cada diez vehículos saldrán de fábrica con propulsión totalmente eléctrica. Sin embargo, aún entonces una cuarta parte de los vehículos en circulación tendría motor de combustión", explicó.

Y agregó: "De esto se desprende una consecuencia clara e inequívoca: hasta mucho más allá del 2030 será necesario que coexistan diferentes sistemas de propulsión. Me refiero a una mezcla de gasolina, diésel y gas natural. Paralelamente, necesitamos propulsión híbrida, vehículos 100 % eléctricos e hidrógeno.  Por eso, nuestro llamamiento a la clase política es el siguiente: establezcan unos valores límite de gases de escape razonables para una protección climática efectiva, pero permitan que la industria elija las tecnologías óptimas para alcanzarlos. ¡Sus disposiciones no deben forzar soluciones que no son rentables!"

Para Degenhart, el mayor obstáculo en el camino hacia la conducción totalmente eléctrica es la batería. Él calcula que no habrá una tecnología competitiva hasta después del 2025. El presidente de la Junta Directiva está siempre abierto a la introducción de células de batería en estado sólido en la producción: "Es factible que en el futuro produzcamos nuestras propias células de batería. En particular, aquellas compuestas por materiales en estado sólido. La condición necesaria es que el modelo de negocio sea atractivo. Probablemente, tomaremos esa decisión después del 2020".

Continental ya cuenta con una amplia e innovadora gama de productos y servicios con los que señala el camino global de la movilidad del futuro: el sistema de 48 voltios o "Volkshybrid", que hace que la combustión sea más eficiente y limpia, es uno de los actores principales de la conducción automatizada, junto con los sensores, los actuadores y el sistema electrónico. CUbE es el nombre de la plataforma de Continental para el desarrollo de vehículos sin conductor. BEE es el concepto de vehículo de la empresa tecnológica, diseñado para uno o dos adultos, que combina economía con ecología y acude cuando así se lo ordenan. En colaboración con Argus Cyber Security de Israel, Continental ganó experiencia adicional a la hora de equipar los vehículos con escudos de protección, de modo que no reciban comandos erróneos, reconozcan las manipulaciones y las rechacen.

"El futuro de la movilidad necesita cada vez más software. Más de la mitad de las inversiones en nuevas funciones de conducción se dedica actualmente a su desarrollo. En algunos casos, pronto se llegará al 80 %", indicó Degenhart. Se debe diferenciar entre los programas clásicos, derivados del comportamiento humano, los programas de aprendizaje, que aprenden con los métodos de la inteligencia artificial hasta estar listos para la fabricación en serie, y los programas de aprendizaje continuo, que siguen aprendiendo durante la aplicación en serie. "Las reglas de juego de nuestras industrias están cambiando radicalmente", dijo Degenhart.